Una multitud que se acercó al Capitolio. Más temprano, el republicano fue a una misa y compartió un té con Obama en la Casa Blanca. Hubo disturbios y detenidos.
La ceremonia empezó con la presentación de los invitados ilustres, entre los que se encuentran los expresidentes George W. Bush y Bill Clinton, junto a sus esposas Laura y Hillary, que fue precisamente fue la rival de Trump en las elecciones del 8 de noviembre -duramente criticada por el magnate- y que fue derrotada por el republicano, en un resultado impensado, contra todos los pronósticos.
Trump fue recibido con aplausos al entrar al palco del Capitolio previo a tomar juramento como presidente de los Estados Unidos, elevó sus pulgares y dijo «gracias» en varias ocasiones, mientras se escuchaban fuertes aplausos. Lejos de su estilo provocador y desfachatado de campaña, se lo notó con rasgos adustos y de tensión.
America First». «Los Estados Unidos primero». Este será el eje del gobierno de Donald Trump, según aseguró en su primer discurso como presidente de Estados Unidos, en le que retomó la retórica antiestablishment y proteccionista que lo llevó a la Casa Blanca.
Después de agradecer al «magnífico» presidente Barack Obama su ayuda en la transición, afirmó que la de hoy era una transición distinta, porque «no se transfiere sólo el poder de un partido a otro», sino que el poder pasa «de Washington DC a ustedes, el pueblo».
«Este día es de ustedes», insistió el ahora 45° presidente de EEUU . «Este momento es de ustedes, este momento le pertenece a ustedes», remarcó el magnate republicano. «Este día es de ustedes, de Estados Unidos, de su país», amplió Trump, en medio de aplausos.