El líder de Corea del Norte, Kim Jong-un, estuvo supervisando en persona el último lanzamiento de un «cohete balístico de precisión guiado», que tenía como objetivo probar un arma «capaz de realizar ataques de ultraprecisión sobre objetos enemigos en cualquier área», informa Reuters citando a la agencia KCNA.
Según la agencia estatal norcoreana, Kim recalcó que la prueba de este misil balístico de corto alcance tipo Scud supuso «un paso adelante en el espíritu de enviar un ‘paquete de regalo’ más grande a los yanquis» si EE.UU. decide llevar a cabo alguna provocación militar. En esta línea, ha ordenado el desarrollo de más armas estratégicas poderosas.
«Cada vez que se transmiten noticias sobre nuestra victoria, los yanquis se preocupan y los gánsteres del Ejército títere surcoreano se desmoralizan más y más», declaró el líder norcoreano.
Asimismo, KCNA sostiene que el misil balístico «alcanzó correctamente el blanco planeado con una desviación de siete metros». El proyectil voló alrededor de 450 kilómetros y, según estimaciones del Gobierno nipón, cayó en aguas de la zona económica exclusiva de Japón.
En los últimos meses, la península coreana vive una escalada de tensión debido a la persistencia de Pionyang en seguir adelante con su programa nuclear y a sus reiterados lanzamientos de misiles balísticos.
El 21 de mayo, Corea del Norte efectuó el lanzamiento del misil balístico de alcance medio Pukguksong-2. El proyectil voló una distancia de 500 kilómetros y cayó en el mar del Japón.
En respuesta, Estados Unidos envió a la región del Pacífico un tercer grupo de combate encabezado por un portaviones para tratar de contener a Pionyang.
En los más de cinco años que Kim Jong-un lleva en el poder, Corea del Norte ha superado en más del doble la cantidad de pruebas de misiles balísticos realizadas por su padre y predecesor en el cargo, Kim Jong-il (1994-2011).
Se estima que el país ha efectuado en total cinco pruebas nucleares y ha lanzado más de 70 misiles balísticos desde el fallecimiento de Kim Jong-il en diciembre de 2011.