Aunque advirtieron que desde el Gobierno no recibieron ningún llamado, el sector puso fin a la medida de fuerza luego de que se suspendieran las restricciones para la comercialización del maíz.
Jorge Chemes, presidente de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), dijo que “están abiertos al diálogo en todo momento” y que no van a permitir medidas que perjudiquen al campo.
“Levantado el cierre a la exportación se levanta la medida”, afirmó.
Al mismo tiempo dijo que ahora “hay una instancia distinta para hablar mucho más” y que “Argentina está pasando por momentos especiales que debemos aprovechar”.
Agricultura anunció que se acordó «sustituir el límite de 30.000 toneladas diarias de exportación de maíz por un monitoreo del saldo exportable para llegar al empalme de cosecha sin tensiones, con el compromiso del sector privado».
«Tal como nos comprometimos, estos encuentros nos permiten continuar avanzando en compatibilizar los intereses privados con la necesidad del Estado de garantizar los bienes esenciales en todo el territorio nacional», destacó el ministro de la cartera agraria, Luis Basterra.
El funcionario nacional explicó que «para el Gobierno nacional es prioritario desacoplar los precios internos de la dinámica de los precios internacionales, al tiempo que podamos seguir fortaleciendo el desarrollo del sector y las exportaciones. Desde el Ministerio trabajamos para encontrar las mejores herramientas que nos permitan crecer con ese doble objetivo».
También se acordó «consensuar un acuerdo de largo plazo con los sectores consumidores y proveedores de maíz, en sintonía con el Programa Precios Cuidados, en el que se habló, como ejemplo, de la constitución de un Fideicomiso de larga duración como solución estructural y método de desacople entre el mercado internacional y el de abastecimiento a transformadores de maíz».