El 20 de mayo, Cecilia Rivas persiguió a quien le había robado el celular y a su cómplice, en una maniobra que terminó en tragedia.
Cecilia Rivas asegura que vive un calvario luego de que estuvo involucrada en una maniobra con el auto por la que murió un ladrón y otro quedó gravemente herido: «Tengo pánico de que nos hagan algo, por la vida de mi hijo, y no sé qué hacer».
Todo comenzó el domingo 20 de mayo cuando Oscar Orona se subió al Peugeot 207 de Rivas y le arrebató el celular en Balvanera. Él escapó en moto junto con Julián Cardozo y ella los persiguió junto con una amiga, lo que terminó en la muerte del ladrón y la internación del cómplice.
«Me quedé en el lugar y fui la que pidió ayuda», aseguró Rivas en declaraciones televisivas. «Lo seguí para sacarle una foto y escracharlo», agregó.
Ahora Rivas está bajo tratamiento psicológico: “No es mi vida, es algo que yo desconocía todo esto que me está pasando».
Por su parte, Gabriel, hermano de Oscar Orona, le había dicho: «Si te robó te pido disculpas, pero si lo mataste la tenés que pagar». En un primer momento, Rivas había declarado que no llegó a tocar la moto, pero las pericias preliminares señalaron que hubo un impacto que ocasionó el choque contra el otro vehículo.