Cerca de 1.200 miembros de la Gendarmería y Prefectura forman parte de esta primera etapa en Avellaneda, Lanús, Lomas de Zamora y Quilmes.
Efectivos de la Gendarmería y Prefectura volvieron a patrullar el conurbano bonaerense con el propósito de custodiar las zonas más calientes de la región afectada por la inseguridad. La primera etapa del plan federal incluye los municipios de Lanús, Lomas de Zamora, Quilmes y Avellaneda. Son cerca de 1.200 oficiales distribuidos en 300 por distrito. En dos semanas se sumarán los partidos de Almirante Brown, Esteban Echeverría, Ezeiza, La Matanza y Morón.
El intendente de Lomas de Zamora, Martín Insaurralde, calificó de «positivo el arribo de los Gendarmes al Conurbano».
Para el intendente de Lanús, Néstor Grindetti, el despliegue de las fuerzas de seguridad federales ayudará a la prevención del delito, ya que habrá «coordinación» con las instituciones locales para abordar la problemática de la inseguridad.