El objetivo es “visibilizar y concientizar sobre la peligrosidad de tener medicamentos vencidos en los domicilios”, remarcó la secretaria de Salud y Ambiente, Claudia Enrique.
Los vecinos podrán acercar comprimidos, jarabes, óvulos y cremas vencidas a cualquiera de los seis centros de salud municipales; tres puntos recepción (la Danza de la Flecha en Alameda de la Federación; plaza Alvear, sobre calle Buenos Aires; y en la plaza 1° de Mayo); y centros de referencia como el Ramón Carrillo, Arturo Oñatibia (ex Corrales), Gerardo Domag y el centro de salud Cecilia Grierson.
Se aclara que no se recibirán objetos punzantes (jeringa, aguja o bisturí), y tampoco nada de vidrio, gasas o pañales.
La directora de Farmacia, Ludmila Bellefemine, aclaró que actualmente se reciben medicamentos vencidos en los centros de salud municipales y que el Municipio tiene una política de recolección y disposición final articulada.
“Es importante disminuir la contaminación del ambiente de los medicamentos domiciliarios vencidos, ya que al arrojarlos al sistema de desagües se contamina el agua que va al río y se afecta a la flora y fauna local. A su vez, se pretende evitar que se consuman, sacándolos del hogar y evitando que se arrojen a la basura, ya que son tóxicos e incluso pueden causar la muerte”, explicó la funcionaria.
Trabajo articulado
La coordinadora de Asuntos Profesionales del Colegio de Farmacéuticos de Entre Ríos, Roxana Firenstein, indicó que desde la entidad se busca “dar respuesta a una necesidad del ciudadano, en este caso de Paraná y esperamos que se replique de esta manera en el resto de la provincia”.
Por último, la presidenta del Círculo de Farmacéuticos de Paraná, Adriana Deyusto, comentó que el objetivo de la institución “es trabajar de manera conjunta con el Municipio y el Ministerio de Salud de Entre Ríos para generar conciencia, ya que la salud y el ambiente necesitan de nuestro cuidado y el compromiso de todos”.